Síguenos en nuestras redes sociales

Cultura

Aprendizaje por provocación o aprendizaje provocado (1)

Afortunadamente, en el blog institucional, con la anuencia del profesor Jesús Octavio Toro Chica, docente administrativo de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de Uniremington, comparto con ustedes una primera entrega de su enriquecido y abierto análisis en el contexto del mundo de la educación y las instituciones formativas y cuyas reflexiones seriadas se han venido publicando en el periódico institucional En-Torno (la actual, en la edición de septiembre de 2017). Es un honor contar con la colaboración del profesor Toro Chica en este medio digital abierto a la opinión pública. Así entonces, vamos al grano. (César Augusto Muñoz Restrepo - Corrector de estilo institucional de Uniremington - Coordinador de Edublog - cmunoz@uniremington.edu.co) Una reflexión introductoria: las mismas palabras son provocadoras... a manera de explicación de los “¿para qué?” Quienes hemos estado comprometidos con el maravilloso mundo de la educación, sabemos que la motivación cumple un papel de muchísima importancia en la calidad de los aprendizajes propuestos en las instituciones educativas para todos los estudiantes; son parámetros acordes con unas realidades sociales, culturales, económicas y políticas y que los estudiantes deben asimilar para garantizar el mejoramiento de su calidad de vida y de su entorno, así como para el desarrollo sostenible y sustentable de sus comunidades. Sabemos también que esa calidad de los aprendizajes está directamente ligada al gusto y al deseo que tengan los estudiantes por aprender determinados temas, conceptos o prácticas, motivados desde sus propias actitudes, aptitudes y vocación. Desde luego, damos por supuesto que ese gusto o deseo de los estudiantes debe ser permanente y estimulado por los docentes, quienes hoy en día han perdido toda su validez como “enseñantes” y van adquiriendo toda su preponderancia como metodólogos y estrategas para el aprendizaje. En este contexto, también se ha dicho que el hambre y la necesidad agudizan el ingenio; pues respetuosamente sugerimos que el nuevo maestro, como ese metodólogo y estratega para el aprendizaje, debe despertar esa “hambre”, esa necesidad de sus estudiantes, con todo lo que esté a su alcance para provocarlos y predisponerlos para el aprendizaje. Es mi pretensión reflexiva y analítica, desarrollar estos pensamientos que apuntan a nuevas formas de ser y hacer las cosas por parte de los “nuevos maestros”, para lo cual haré unas entregas continuas que pondré a disposición de nuestro periódico institucional En-Torno, durante esta y posteriores ediciones. Sin más armas o argumentos que mis palabras y mis propios convencimientos, y sin más preámbulos que el pedirle a mis ocasionales “sujetos de investigación” que dijesen qué era lo primero que se les venía a la mente cuando escuchaban las palabras: “provocar”, “provocación” y “provocado”, resultamos involucrados en un ejercicio que, para mi gusto, encierra mucho de educativo, algo de académico y un poco de investigativo; aun así, con ese mucho, con ese algo y con el poco recibido, y con mis convicciones resultantes de mi actividad educativa durante toda mi vida, en todos y cada uno de los niveles de la educación, abarcando desde el infantil hasta el posgrado, estoy seguro de poder ofrecer a mis lectores –que espero sean muchos– algunos pensamientos, ideas, argumentos y conceptos sobre el ideal que, poco a poco, he venido construyendo y que, seguramente con los aportes de quienes los quieran hacer, seguiremos enriqueciendo, como propuesta que es, pero sobre la cual, estoy seguro contribuirán a enriquecer el debate y las construcciones que se vienen dando hacia la identificación de las mejores formas de aprendizaje en el siglo XXI, asociadas a las intervenciones que se han de hacer, gracias a la presencia irrenunciable de las tecnologías de la comunicación y la información en todos los ámbitos educativos y en un mundo que definitivamente hace parte de lo que he denominado: “Aprendizaje por provocación” o “Aprendizaje provocado”. El acto pedagógico… La definición del aprendizaje provocado o por provocación, que haré explícito más adelante, surge de mis observaciones, vivencias y experiencias sobre el acto pedagógico, y creo muy conveniente que conozcamos, desde mi perspectiva, lo que identificamos como tal. El acto pedagógico abarca todas aquellas acciones formales o informales mediante las cuales el maestro se interrelaciona con sus estudiantes, generando interacciones de tipo social, académico, personal, relacional y profesional, todas ellas conducentes a propiciar aprendizajes en las dimensiones del ser, el saber, el sentir, el pensar, el hacer y el estar de los seres humanos, sobre los que en determinado momento de su historia particular han debido experimentar para acompañar su proceso de formación. Ahora bien, observemos que, intencionalmente, saco al maestro de su aula de clase, como recinto único y privilegiado para suscitar aprendizajes, pues esa es una de las modificaciones y un cambio sustancial en el aspecto pedagógico dentro del desarrollo del aprendizaje por provocación o aprendizaje provocado. Aunque luego me referiré más a fondo alrededor del acto pedagógico como fundamento para el aprendizaje que propongo. El porqué de lo provocado Muchos se preguntarán el porqué de lo provocado. Para comprender un poco el concepto, y de la manera más sencilla, me aproximaré a una serie de definiciones, retomadas de varios diccionarios; algunas de ellas de la “más alta alcurnia” y, otras, un poco “menos edificantes”, pero que nos servirán para sentar nuestras propias concepciones acerca de lo provocado, del provocar y de la provocación: Provocar: Del lat. Provocare: Llamar para que salga fuera. Mera coincidencia: de las primeras definiciones que aprendimos sobre educar, viene del latín “educere”: sacar, extraer. Intentar que una persona reacciones con palabras, gestos o acciones. Incitar a una persona a hacer una cosa con palabras, gestos o acciones Inducir. Ocasionar una situación o evento. Causar. Producir. Despertar deseo en los demás con palabras, gestos o acciones. Causar una reacción física o emocional. Incitar. Mover. Apetecer, tener ganas de alguna cosa. Excitar, inducir a otro a que ejecute una cosa. Irritar, enojar [a uno] con palabras u obras. Causar alguna cosa. Incitar a alguien a discutir. Excitar el deseo de manera intencionada. Producir una reacción de un sentimiento, inducir un estado diferente. Producir algo consecuencias en las cosas o la gente. Voluntariamente llevar a enojo a una persona. Voluntaria o involuntariamente despertar el apetito sexual de otros. Aun con este compendio, no nos podemos quedar ahí, con aquello que nos dice lo establecido desde el mundo, en ocasiones, encopetado desde la academia. Por lo anterior, también hay que recopilar lo que dice la gente del común; personas que voluntariamente han proporcionado su tiempo y su palabra para permitirme sustentar y fundamentar, de primera mano, lo que quiero plantear, centrándome un poco en lo que pretende esta primera entrega del escrito, como dar a conocer a nuestros lectores o estudiosos, el sentido y los resultados de lo que se buscó indagar con resultados muy halagadores para los efectos que pretendemos, sobrepasando en mucho las expectativas que nos habíamos fijado. En efecto, señalo algunos datos relevantes y que en su momento podrían soportar la ficha técnica de la investigación, que seguramente se seguirá desarrollando, con el fin de seguir fortaleciendo esta propuesta desde lo conceptual, lo metodológico y lo estratégico. Datos preliminares de lo que piensa la gente… Ahora bien, haciendo uso de una pregunta directa sobre la cual se hablará más adelante, hubo un acercamiento a lo que la gente piensa, resultados que estaré compartiendo con ustedes en la próxima entrega de esta serie, en especial, porque afianzan la reflexión que he venido esbozando. Por lo pronto, dejo algunos datos: Total de palabras o acepciones recibidas: 17 324. Cada persona entrevistada podría decir mínimo tres y máximo seis. Únicamente tres de las personas entrevistadas dieron tres respuestas; once de los encuestados dieron el máximo de respuestas posibles; la gran mayoría de los participantes estuvieron centradas entre cuatro y cinco respuestas. Básicamente, para el caso concreto de nuestro interés, retomamos solo aquellas respuestas que correspondían a la pregunta realizada, encontrando muchas coincidencias, tanto en la palabra o en acepción, así como en el significado que para cada uno de los participantes encerraba la palabra o expresiones dadas. Buscando no dispersar mucho la muestra, aunque al mismo tiempo conservando la mayor imparcialidad, se hizo la correspondiente agrupación por semejanzas, quedando al final un total de 131 palabras, las que, si bien es cierto, especialmente en su definición han sido retocadas un poco, por aquellas cuestiones de simple exigencia del lenguaje escrito, no es menos cierto que encierran en su totalidad el sentido o significado que a la misma le ha querido dar quien la ofreció como respuesta. Por razones obvias, en el listado de información no las pusimos todas sino algunas de ellas que nos serán útiles como referentes. Como se trataba de entrevistas directas, aprovechando las conversaciones –informales o formales– que se llevaban a cabo, las respuestas eran consignadas en cuadernos-agendas (muy pocas digitalizadas), tal cual eran entregadas por los sujetos participantes. En resumidas cuentas, aunque aparentemente la lectura del listado que se ofrece puede tornarse un poco monótona, como maestro que he sido y, pedagógicamente hablando, la considero de vital importancia para la comprensión posterior, no solo del análisis que se hace de ellas, sino también de los aportes que han de entregar para el desarrollo del tema. Incluso, a ustedes los invito para que en una lectura “de corrido”, se vayan estableciendo vínculos y ligazones entre palabras y conceptos, lo que en definitiva ayudará en mucho a la comprensión de lo que se pretende compartir y poner a disposición de nuestros lectores. En suma, quizá, para nuestro gusto, encontremos algunas palabras que en cuanto a su definición, de acuerdo con lo solicitado en la pregunta, coinciden en un todo en relación con nuestras concepciones y, por ende, a los signos, a los significados y a los significantes que poseemos. Empero, existen otras que se alejan un poco de ello, pero responden a una percepciones, conocimientos y experiencias de quienes las han manifestado. Y por su parte, hay un tercer grupo que se puede alejar, casi que diametralmente, de lo que nosotros sabemos y pensamos, pero que en definitiva las hemos dejado tal cual, puesto que expresan la opinión de los participantes. En las entregas próximas encontraremos algunas pistas para el análisis propuesto, las que refrescarán de gran manera nuestras posturas pedagógicas y además nos abrirán nuevas expectativas hacia los nuevos escenarios propuestos. Por: Jesús Octavio Toro Chica Docente administrativo Facultad de Educación y Ciencias Sociales de Uniremington octavio.toro@uniremington.edu.co Imágenes copipegadas de: http://bit.ly/2xauLrd, http://bit.ly/2wgNV2a y http://bit.ly/2vK38qJ (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los url tienen técnica de acortamiento aplicado).

Uniremington al parque

“Uniremington al parque en Medellín y su área metropolitana” es un aporte directo en beneficio de las comunidades de nuestros entornos, yendo más allá de la oferta académica y consolidando la proyección social de Uniremington en diversos ámbitos. “La Corporación Universitaria Remington es de la comunidad, ha crecido para la comunidad y trabajamos para la comunidad”, afirma el doctor Arcadio Maya Elejalde – Rector de Uniremington. Y sin duda alguna, el programa “Uniremington al parque” es una muestra fidedigna de la proyección social de nuestra institución universitaria, complementando la integralidad profesionalizante y humana de Uniremington. De dónde surge “Uniremington al parque” En una reseña elaborada por John Fredy Castro Álvarez, docente-investigador de la Facultad de Ciencias de la Salud, y publicada en el periódico “En-Torno” de septiembre de 2016, (medio de comunicación institucional de Uniremington), explicó que la idea de este programa, la cual se ha venido consolidando en jornadas ya institucionalizadas, se originó en el curso de Microbiología y Parasitología del programa de Enfermería de Uniremington, adscrito a la Facultad de Ciencias de la Salud, con el objetivo de motivar al estudiante a aprehender los aspectos básicos sobre los microorganismos y contextualizarlos en el proceso salud-enfermedad. Se buscaba entonces retomar los contenidos de las clases y adaptarlos a actividades de promoción y prevención donde los estudiantes consiguieran apropiarse de los conceptos claves y aprovechar sus destrezas para compartirlas con la comunidad externa en relación con la promoción de la salud y prevención de ciertas enfermedades infecciosas. A este proceso se unió la Facultad de Medicina Veterinaria de Uniremington, lo cual ha enriquecido el programa, ya que en las jornadas programadas, además de realizarse las actividades pertinentes de promoción de la salud y prevención de la enfermedad de las personas, se ha incluido la información debida frente al cuidado de las mascotas, así como su atención debida. El objetivo general… “Uniremington al parque” busca institucionalizar, lo cual ya se ha venido consolidando, unas actividades en las cuales se pueda interactuar con los transeúntes de Medellín y otros municipios del departamento de Antioquia, y poderles transmitir pautas y conocimientos básicos para que identifiquen y tomen mayor conciencia acerca de diversos problemas de salud y las diferentes formas de prevenirlos, tanto en las personas como en la población animal. Vale anotar que la primera jornada de este programa se llevó en 2016 en el tradicional parque Berrío, en pleno corazón del centro de Medellín. Su acogida, ha hecho que periódicamente se repita en este lugar. Igualmente, nos hemos descentralizado, llevando el programa al parque central del barrio Manrique, al nororiente de nuestra ciudad. Asimismo, “Uniremington al parque” se realiza en los municipios de Girardota y Copacabana, los que hacen parte del área metropolitana de Medellín. Algunas actividades en las jornadas • Promoción y prevención de enfermedades infecciosas. • Tamizaje de tensión arterial e índice de masa corporal. • Prevención de lesiones de causa externa. • Microcharlas sobre enfermedades zoonóticas. Igualmente, siempre se ubica un estand institucional donde está disponible toda la información de los programas académicos y de servicios que oferta Uniremington. Impacto institucional y social del evento Este esfuerzo de “Uniremington al parque” es un aporte directo en beneficio de las comunidades de nuestro entorno, yendo más allá de la oferta académica y proyectando nuestras fortalezas en beneficio de la ciudadanía, la salud familiar y de nuestras mascotas y otros animales. En suma, en cada jornada realizada, los rostros alegres y orgullosos de estudiantes, docentes, personal administrativo y, en especial, los transeúntes, son alicientes para esforzarnos en el fortalecimiento continuo de “Uniremington al parque”.

Historia Uniremington
Historia uniremington

La Escuela Remington fue la primera Institución en Antioquia para brindar formación para el trabajo y el desarrollo humano. Un lugar donde muchos de nuestros abuelos y padres se educaron y aprendieron a usar sus historias, usando la máquina de escribir.

Redacción tradicional y en internet: no hay un “versus”…
Redacción tradicional vs Redacción internet

A propósito del artículo: “La tecnología para el lenguaje español: ¿un mal necesario?” el cual publiqué el 29 de junio del año en curso en Edublog, hice memoria frente a algunas anotaciones y lecturas que he “digerido” en relación con las diferencias de la redacción tradicional o clásica y aquella que se plasma en internet, sobre todo en el género periodístico. A propósito del artículo: “La tecnología para el lenguaje español: ¿un mal necesario?” el cual publiqué el 29 de junio del año en curso en Edublog, hice memoria frente a algunas anotaciones y lecturas que he “digerido” en relación con las diferencias de la redacción tradicional o clásica y aquella que se plasma en internet, sobre todo en el género periodístico. También recordé algunas inducciones y lecturas en donde se recalca que para la edición y despliegue de textos en el mundo del ciberespacio (sitios web y redes sociales, en particular), hay que tener en cuenta aspectos como las “cabeceras h1 con la keyword principal de cada contenido”; o que “la descripción debe ser de 250 caracteres máximo”; que “la url del contenido debe tener la palabra clave, ojalá, al comienzo de la frase”, entre otros parámetros que aconsejan los especialistas en el ramo. Y tienen los argumentos: estas pautas son fundamentales para que los navegantes en internet se topen con la información requerida sobre los productos o servicios que ofrecen las incontables de empresas o entidades del mundo, sin importar su rango, nacionalidad, filosofía, experiencia, etcétera.   Medios que no se excluyen En particular, creo que realmente no hay un “versus” entre la redacción clásica o tradicional y la evolución que hoy enmarca el ciberespacio para alojar contenidos visibles, estadísticamente populares y que mantengan unos criterios de calidad en su estilo y redacción. No se excluyen. De hecho, aunque son dos espacios diferentes, en ellos también confluyen usuarios que gustan de la lectura de medios impresos (libros, revistas, periódicos, etc.) que buscan complementar una información a través de sitios web específicos, y viceversa. En síntesis, se complementan. Precisamente –y no es paradoja–, en mi “navegación” a través de internet me encontré con una explicación, que, a mi juicio, es muy coherente y precisa; que resume las diferencias entre la redacción tradicional y la que está orientada hacia la web. Leí, por ejemplo, en el blog “Vivilia.com”, lo siguiente: “A diferencia de lo que puedas creer, la distinción fundamental entre los libros, revistas o periódicos impresos y los artículos de la web no es el soporte físico o electrónico. Lo que marca la diferencia es la forma de presentar los contenidos adaptados a un perfil específico de lector con motivaciones diferentes. […] Quien lee un libro o una revista especializada busca profundizar en un tema en particular, mientras que el usuario de Internet espera encontrar una información rápida y sencilla para aclarar sus dudas. Además, no suele pasar mucho tiempo en una misma página. Tampoco acostumbra a leer textos muy largos. Los expertos afirman que un internauta ni siquiera lee, sino que “escanea” la información fijándose solo en las palabras o frases que le llaman la atención”. Hay que dejar claro que la ética, la veracidad y la claridad en los contenidos son valores que no hacen excepciones. En este contexto de búsqueda de respuestas, también me encontré con unas diferencias que se exponen en Miamidiario.com (“Vive Miami en español”), referidos especialmente al campo periodístico: “…los lectores digitales requieren que sea el medio quien jerarquice las noticias y destaque qué es lo más importante porque no cuenta con las mismas estrategias de visualización de los medios tradicionales. En los medios impresos, el lector puede armar y determinar la importancia de las noticias debido al tamaño del titular, la tipografía y espacio que ocupa cada información. A diferencia de los medios impresos, los cuales sabemos que contendrán las informaciones más importantes del día anterior; los medios digitales se enfrentan al reto de la inmediatez que, aupado por el auge de redes sociales como Twitter en donde el periodismo ciudadano juega un papel fundamental, hacen que sus dinámicas de trabajo sean mucho más rápidas para poder ser competitivos y estar actualizados. Al lector digital le interesa conocer "el aquí y el ahora", mientras que el de impreso, sabe que obtendrá la misma información, pero con mayor profundidad. Una de las cualidades esenciales de los medios digitales es que, en una misma publicación no sólo le permite al lector conocer la información de primera mano, sino que, por su naturaleza multiplataforma, brinda otros complementos de la noticia como videos, galerías, enlaces relacionados […] Uno de los retos del periodista digital es el lenguaje, puesto que, dada las necesidades de información del lector y la naturaleza del medio, se ve en la necesidad de crear contenidos más directos y totalizadores que permitan en una lectura rápida recopilar la mayor cantidad posible de datos relevantes. Se supone que el lector de impresos cuenta con un mayor tiempo para leer, por lo que es el mismo quien arma el "mapa" de sus intereses y cómo accede y jerarquiza la información que el medio le presenta. En cuanto al lenguaje, ya habíamos comentado que el lector digital requiere de la economía del lenguaje para hacer su lectura más amena, mientras que en el mundo impreso se suele recurrir (sic) la reiteración de ideas por no poseer el concepto de entradas múltiples, retroceder la página, etc. (sic) […]” Por todo lo anterior, en lo posible traté de escribir enfocado hacia un canal virtual, sin saber en verdad si he logrado hacerlo de la mejor manera. Ello me deja más convencido de que cada vez más es necesario adentrarme –adentrarnos– en esas pautas específicas para redactar contenidos en esta evolución hacia el ciberespacio. Enlaces de fuentes referenciadas (Los URL tienen técnica de acortamiento aplicado): Blog Vivilia.com: http://bit.ly/2vTPVct MiamiDiario.com: http://bit.ly/2tEEKYq Imágenes copipegadas de:  http://bit.ly/2eJn1IF; http://bit.ly/2vCM2sW; http://bit.ly/2tEjnXg y http://bit.ly/2v100b1 (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los URL tienen técnica de acortamiento aplicado). Por: César Augusto Muñoz Restrepo Corrector de estilo institucional de Uniremington cmunoz@uniremington.edu.co

El idioma español: lengua viva y mezcla de culturas

Antes de adentrarme a la cuestión que referencia el título de este artículo, debo reconocer que el texto: “La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos”, que publiqué en dos entregas en la intranet de Uniremington, en este espacio de Edublog, en la categoría “Cultura”, me motivó a esbozar –para ser justo– los aportes históricos de otros idiomas y culturas al lenguaje hispano o castellano. Antes de adentrarme a la cuestión que referencia el título de este artículo, debo reconocer que el texto: “La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos”, que publiqué en dos entregas en la intranet de Uniremington, en este espacio de Edublog, en la categoría “Cultura”, me motivó a esbozar –para ser justo– los aportes históricos de otros idiomas y culturas al lenguaje hispano o castellano. Ahora bien, solo será una reseña que puede ser un “abrebocas” para quien quiera investigar más fondo esta evolución del idioma español hasta nuestra época de la denominada generación Milenio (generación Y o los Millennials). De todas maneras, hay unas estadísticas recientes que siguen evidenciando la importancia actual de nuestra lengua en el mundo. Para la muestra, comparto de forma literal dos apuntes del texto: “El español una lengua viva – Informe 2016”, editado por el Instituto Cervantes: “En 2016, más de 472 millones de personas tienen el español como lengua materna. A su vez, el grupo de usuarios potenciales de español en el mundo (cifra que aglutina al grupo de dominio nativo, al grupo de competencia limitada y al grupo de aprendices de lengua extranjera) alcanza casi 567 millones. El español es la segunda lengua materna del mundo por número de hablantes, tras el chino mandarín, y también la segunda lengua en un cómputo global de hablantes (dominio nativo + competencia limitada + estudiantes de español)”. (Los resaltados son mío e intencionales). Sin embargo, más allá de esa queja de muchos de los que somos defensores de la irónica “pureza” del idioma español en relación con la invasión de los famosos extranjerismos, la mayoría de ellos innecesarios, debemos recordar, tal como se afirma en el texto digital: “Día del Idioma”, publicado por Iefaangel.Org, lo siguiente: “Hemos afirmado que el castellano nació de la evolución del latín vulgar. Por tanto, la estructura gramatical de nuestro idioma es completamente latina y la mayor parte de su vocabulario está formado por palabras de esa lengua, más o menos evolucionadas”.     Algunas lenguas y culturas aportantes Lo cierto es que no todo nuestro idioma español proviene del latín vulgar. Otras lenguas, históricamente, aportaron de manera importante al léxico que hoy utilizamos, entre ellas, las siguientes: El árabe Según varias fuentes históricas, del árabe se retomaron más de cuatro mil palabras. A continuación, algunos ejemplos citados en: “Lenguas y culturas que influyeron en el léxico español” (Etimologías de Chile.Net): “Palabras que empiezan por "al-": alacrán, albóndiga, alcázar, aldea, alfil, alfombra, algarabía, algodón, alhaja, almacén, almanaque, alquería y alubia. Al- en árabe es equivalente a los artículos españoles el o la. Cuando está antes de z- se asimila. Así tenemos: azabache, azafata, azafrán, azar, azimutal, azófar, azotea, azúcar y azulejo. Términos relacionados con substancias y la química: albayalde, alcalino, alquimia, ámbar, aceite, alcohol, café, elíxir, soda, y tabaco. Algunas palabras que se refieren a la organización político-militar: adalid, alcalde, alcaide, alférez, alferza, alguacil, almirante y jeque. Palabras relacionadas con el comercio: aduana, alhóndiga, almacén, almoneda, arancel, maravedí, tara y tarifa Y estas otras palabras: ajedrez, asesino, azafata, ensaimada, jaqueca y serendipitoso”. El griego A partir del de la época del Renacimiento, según datos históricos, el español acudió al griego para formar nuevas palabras. Por ejemplo: “La formación de los días de la semana y las siguientes palabras tienen origen griego: atleta, Biblia, gélido, matemática, menopausia, morfina, política, programa, sarcófago, y tártaro”. (Etimologías de Chile.Net). Lenguas germánicas Esta influencia tuvo su origen en la invasión de la península española por parte de los pueblos germanos en el siglo V. Según datos históricos, “[…] Estas voces pertenecen casi siempre a instrumentos, costumbres y usos distintos de los existentes en el mundo romanizado. Los germanos, dejaron en la lengua española términos de legislación, como gabela y feudo, otros de carácter militar, como guerra, guardia, espuela, robar, botín, tropa, brida, yelmo, guante, dardo, estoque y de costumbres domesticas: escanciar, guisar, brasa”. (Iefangel.Org) El francés Homenaje, mensaje, fraile, monje, manjar, vinagre… El italiano Diseño, fachada, bizarro, campeón, novela, soneto, banca, charla, clientela, escopeta… Lenguas neolatinas peninsulares (el gallego-portugués) Capullo, chubasco, sarao, bandera, biombo, mermelada, caramelo…   Las lenguas indígenas americanas (indoamericanas) Estas también han hecho su aporte al idioma español, siendo las de mayor difusión el quechua (lengua oficial del Perú y hablada aproximadamente por 12 millones de personas en ese país, así como en Bolivia, Ecuador, norte de Argentina y en el sur de Colombia); el guaraní (lengua nacional de Paraguay y hablada allí por, aproximadamente, tres millones de personas; igualmente en varias regiones de Argentina y en ciertos enclaves de Brasil y Bolivia); el maya (hablado aproximadamente por un millón de personas en Guatemala, sur de México, Belice y parte de Honduras); el aymara (hablado en Bolivia, en el norte de Chile y en el sur de Perú); y el náhuatl (México y El Salvador). En relación con estas lenguas indígenas, en el sitio web Iefangel.Org, se afirma: “Así como España llevó al continente su idioma, éstas (las indoamericanas) han aportado a la lengua española multitud de vocablos de sus distintas lenguas que en una primera etapa correspondían a fenómenos privativos de las regiones americanas, como los nombres de la flora y la fauna y los accidentes climáticos, como tabaco, chocolate, canoa, tiburón, huracán, patata, tomate. Posteriormente las peculiaridades americanas se han extendido a un campo mayor (…) Todos estos vocablos reciben el nombre de americanismos”. (El resaltado es mío e intencional). Finalizo con la siguiente reflexión: el idioma español, seguramente por innumerables siglos más, seguirá siendo una lengua viva, que aportará al mundo su léxico, pero también mantendrá abiertas sus puertas a expresiones de otros idiomas y culturas en procura de una mayor y mejor comunicación entre los habitantes del planeta Tierra. César Augusto Muñoz RestrepoPor: Corrector de estilo institucional de Uniremington cmunoz@uniremington.edu.co Bibliografía web (mejor que “webgrafía” o “cibergrafía”): Instituto Cervantes (http://bit.ly/29jBB4K), Iefangel.Org (http://bit.ly/2eEoHna) y Etimologías de Chile (http://bit.ly/2dwtimp) / Los enlaces tienen técnica de acortamiento aplicado). Imágenes copipegadas de: http://bit.ly/2eB9saM, http://bit.ly/2eGmsj5, http://bit.ly/2eZjRxR, http://bit.ly/2wC9Srv y http://bit.ly/2gHWpZn (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los enlaces tienen técnica de acortamiento aplicado).

La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos (y II)

En la pasada entrega, me comprometí a que en este segundo y último capítulo de la serie “La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos”, compartiría con ustedes varios ejemplos concretos de términos y frases que enmarcan el “fenómeno” del uso, en unas veces abusivo, y en otras de forma incorrecta, de anglicismos y coloquialismos que “bombardean” a Antioquia y Colombia, y claro está, a otros países sura y centroamericanos, especialmente. En la pasada entrega, me comprometí a que en este segundo y último capítulo de la serie “La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos”, compartiría con ustedes varios ejemplos concretos de términos y frases que enmarcan el “fenómeno” del uso, en unas veces abusivo, y en otras de forma incorrecta, de anglicismos y coloquialismos que “bombardean” a Antioquia y Colombia, y claro está, a otros países sura y centroamericanos, especialmente. Me permito retomar dos apartes del artículo pasado, que creo que son pertinentes recordar para introducir los ejemplos: “[…] Los extranjerismos son aquellas que se importan sin modificaciones y las que causan más controversia ya que si bien a veces son necesarios, otras veces se utilizan por razones de distinción o por ignorancia del equivalente en español”.* (El resaltado en negrilla, es mío.) Y, por otra parte, “[…] como se dice en la filosofía popular: ‘todos los extremos son malos’. No es recomendable abusar de los coloquialismos en ciertos textos o medios que ameritan un lenguaje universal, debido a la diversidad de públicos que los pueden leer o escuchar; y, sobre todo, cuando, afortunadamente, ya no hay fronteras “invisibles” en el ciberespacio”. Listado “top” Comparto un “top” –he ahí el término que encabeza el listado- de esa mixtura de extranjerismos y coloquialismos que se han vuelto comunes para nuestros oídos, e incluso, en textos, principalmente publicitarios y electrónicos de las redes sociales. Extranjerismos: Top: adjetivo que en inglés se refiere a algo –o alguien– que está ubicado en la parte más alta o en el extremo superior de cualquier cosa. Ya es normal –lo que no quiere decir, aceptable–, oír o leer titulares en nuestro medio, como: “Top 10 de los países más felices del mundo”. Alternativas (así sean más extensas en español): “de primer nivel, sobresaliente, entre los mejores, de primera línea”…   Community manager: la Fundación del Español Urgente (Fundéu), recomienda que “se opte por términos españoles como gestor o responsable de comunidades virtuales, digitales, en línea o de internet”. Vale aclarar que no faltan los charlatanes e irreverentes que lo denominan como: “‘chateador’ remunerado”. Outsourcing: se define como asesoría externa. En los países hispanos, en un limpio español, se puede denominar como: externalización y tercerización. Speaker: aclara la Fundéu que “En muchos casos, la voz inglesa speaker es un anglicismo innecesario que es preferible sustituir por equivalentes españoles como: portavoz o vocero; ponente o conferenciante; orador, interlocutor, presentador, animador o locutor, según el contexto. conferencista. Outlet: algunos de sus significados en español, son: salida, desembocadura y desagüe. En general, en nuestro medio, se define como “tienda de productos descatalogados y rebajados”; mejor dicho, y adelantándome a una expresión coloquial del listado respectivo, es un almacén donde se “desenhuesan” de mercancía de mala calidad y con poca posibilidad de venderse. Ranking: o “ranquin” como la hemos adaptado. Mejor: lista, tabla clasificatoria, clasificación o escalafón (acorde con las circunstancias). Online: u on-line. Mejor: en línea. Crossover: su significado para el español es “fusión”. Para colmo, ha sido mal adaptado por los establecimientos de esparcimiento y discotecas que se promocionan con “música crossover”, ya que esto último realmente es “combinar elementos de rítmicas y expresiones que por costumbre no suelen ir juntas en una misma composición” y no forzar la audición, por ejemplo, de la mezcla de baladas con el punk, seguido de un porro sabanero. Shopping y mall: centro comercial o centro de compras (en nuestro medio es más utilizado por que se cree que da caché). Monitorear: es mejor utilizar monitorizar, supervisar o vigilar (el anglicismo que sirvió de raíz es monitor que significa pantalla de control) Coloquialismos: Retomo varias expresiones coloquiales que se utilizan mucho en nuestro medio y otros países de Latinoamérica, los cuales se registran en el diccionario oficial de la Real Academia Española de la lengua (DRAE) y en el diccionario de Americanismos, proveniente de la RAE. Y reitero que ello no avala el abuso de esos regionalismos:   Desenhuesarse: se utiliza sobre todo en Colombia con el significado de “Deshacerse de mercancía de mala calidad y sin posibilidad de venta”, como se hace en los outlet de los cuales ya hice referencia. Alebrestado(da): alborotado (que obra sin reflexión); que muestra ensoberbecimiento; que se enamora con frecuencia; enfadado, enojado. Bacán(a): en lenguaje juvenil, muy bueno, estupendo, excelente; dicho de una persona o de un espectáculo (taquillero). Buseta: (de bus); autobús pequeño. Carcacha: Máquina, aparato o vehículo inútil y desvencijado. Chanchullo: (de chancha); Manejo ilícito para conseguir un fin, y especialmente para lucrarse. En Colombia, es muy conocido –y usado–. Desinflar: desanimar, desilusionar rápidamente. Embarrar: causar daño, fastidiar; cometer un delito; equivocar; estropear (echar a perder). Encanar: (de cana); en el lenguaje del hampa, meter a alguien en la cana, de la que salvan muchos corruptos y chanchulleros en Colombia. Filo: hambre (ganas y necesidad de comer). Por ahora, un fraternal good bye, esperando que “todo bien, todo bien”, como diría El Pibe.   César Augusto Muñoz RestrepoPor: Corrector de estilo institucional de Uniremington cmunoz@uniremington.edu.co Bibliografía web (mejor que “webgrafía” o “cibergrafía”): http://bit.ly/1XijHBk, http://bit.ly/2va62q8, http://bit.ly/2wBObIX, http://bit.ly/2vsMpov, http://bit.ly/2wrnqqf y http://bit.ly/2xfHYzN (Los Url tienen técnica de acortamiento aplicado) Imágenes copipegadas de: http://bit.ly/2g8Kkw6, http://bit.ly/2iuO9fY y http://bit.ly/2xfNBOd (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los url tienen técnica de acortamiento aplicado).

La cultura del lenguaje en Colombia, una mixtura de extranjerismos y coloquialismos (I)
Cultura del lenguaje en Colombia

En dos entregas, en primer lugar, esbozaré una brevísima reflexión sobre esa mixtura de extranjerismos y coloquialismos en nuestra cultura de habla hispana; y en un segundo capítulo, plasmaré unos ejemplos concretos de términos y frases que enmarcan dicho fenómeno. En dos entregas, en primer lugar, esbozaré una brevísima reflexión sobre esa mixtura de extranjerismos y coloquialismos en nuestra cultura de habla hispana; y en un segundo capítulo, plasmaré unos ejemplos concretos de términos y frases que enmarcan dicho fenómeno. Ahora bien, en el titular, nombro solo a Colombia como “sede” de esa cultura de dicha mezcla –indiscriminada, en mi opinión– de extranjerismos (especialmente, anglicismos) y expresiones coloquiales, sobre todo porque es el país del cual soy nativo y en donde cohabito; sin embargo, es necesario reconocer que esta práctica también es rutinaria en otras regiones latinoamericanas, como por ejemplo, México, en donde la “excusa” es ser vecino fronterizo de los Estados Unidos y la gran cantidad de mexicanos que allí migran –y emigran– y que van y regresan al país “manito”. También puedo nombrar, sin entrar en detalles de antecedentes, a Panamá, Argentina, Costa Rica, Nicaragua, e incluso, Puerto Rico. En estos países, cuyos primeros idiomas oficiales es el español, la cultura del lenguaje –bien o mal–se caracteriza por la mixtura a la que me refiero en este artículo. Los extranjerismos innecesarios  Debo hacer una clasificación que básicamente utilizan los defensores del idioma español en relación con los extranjerismos. Para el efecto, retomo unas definiciones textuales de la licenciada Natalia Álvarez, publicadas en: “Revistadigital” (Inesem – Business School (http://bit.ly/2uvDuY1 / Url con técnica de acortamiento aplicado): “En ocasiones da lugar a un calco, estas implican la idea de traducción del término como en baloncesto de basketball en inglés o falso amigo del francés faux amis.  Otras veces la traducción no resulta sencilla bien porque no existe un equivalente apropiado o bien porque hay que utilizar muchas palabras para designar el significado. En esos casos es cuando se opta por adoptar la palabra como tal, como la palabra “chat” que ya se ha integrado totalmente en el léxico español y esto da lugar a los préstamos y los extranjerismos.  Los préstamos son las palabras incorporadas que sufren modificaciones fonéticas o gráficas para adaptarse a las normas de la lengua de destino, por ejemplo: fútbol de football en inglés o corsé del francés corset. Los extranjerismos, son aquellas que se importan sin modificaciones y las que causan más controversia ya que si bien a veces son necesarios, otras veces se utilizan por razones de distinción o por ignorancia del equivalente en español. (El resaltado en negrilla, es mío.) […] En el otro extremo se sitúan aquellos extranjerismos cuyo uso es totalmente innecesario: pagar en cash (efectivo), montar un show (espectáculo), hacer un tour (gira), contar followers (seguidores), estar encantado de ser single (soltero) y muchos más. Tanto su uso como el número de términos extranjeros que utilizamos, casi todos procedentes del inglés, aumenta a gran velocidad en todos los ámbitos, la prensa, el deporte, el trabajo, la moda, la tecnología, etc. Esto se debe a múltiples factores: por un lado, la gran exposición que sufrimos al inglés y, por otro, la rapidez en los medios de comunicación que facilita el contacto y el trasvase entre unas y otras lenguas”. (El resaltado en negrilla, es mío.) En lo particular, los extranjerismos innecesarios son los que, desde mi punto de vista, “afectan” más la cultura comunicativa en los países de habla hispana. En este contexto, también hay que aceptar que la mixtura tiene otra razón de ser: la “generación Y”, denominados como “milenial” (30 años de edad o menos) son los que más usan extranjerismos, en especial, porque sus fuentes de búsqueda y comunicación son el internet y las redes sociales, en donde abundan los extranjerismos, las “abreviaturas del lenguaje” y la comunicación por símbolos. El abuso de los coloquialismos regionales En el marco de la dinámica de nuestro idioma, la Real Academia Española de la lengua, ha tenido que ser flexible y abierta a aquellas expresiones que se afincan en los países de habla hispana, bien sea como términos que se desprenden de otras palabras antiguas del castellano o porque son tradicionales en una región y acogen un significado que enriquecen las alternativas de nuestro idioma. En este contexto, por ejemplo, existe un diccionario especializado de colombianismos y americanismos. Y de hecho, en el diccionario oficial de la RAE (el DRAE), al buscar el significado de ciertas palabras, hay una orientación frente al uso o equivalencia en algunos países determinados. Sin embargo, como se dice en la filosofía popular: “todos los extremos son malos”. No es recomendable abusar de los coloquialismos en ciertos textos o medios que ameritan un lenguaje universal, debido a la diversidad de públicos que los pueden leer o escuchar; y sobre todo, cuando, afortunadamente, ya no hay fronteras “invisibles” en el ciberespacio. Desde el punto de vista de las generaciones, se puede generalizar, que los coloquialismos provienen o son muy utilizados por adultos mayores o “Baby Boomers”, como los nombran en el idioma inglés (nacidos en el segundo y tercer cuarto del siglo XX), e incluso, por la “generación X” (entre 30 y 54 años de edad), la cual le sigue, cronológicamente. En mi opinión, hay ocasiones que no debemos arriesgar la claridad del mensaje por ser exageradamente populistas, y particularmente, en medios de comunicación que ya no son de carácter parroquial, siendo claro en que esto lo expreso sin menosprecio por los medios alternativos y locales que son de gran apoyo para muchas regiones apartadas de nuestro país. Continuará… Por:Imágenes copipegadas de: http://bit.ly/2vWiPwD, http://bit.ly/2vq5gUv y http://bit.ly/2vtLXZ1  (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los url tienen técnica de acortamiento aplicado). César Augusto Muñoz Restrepo Corrector de estilo institucional de Uniremington cmunoz@uniremington.edu.co

Cultura y conciencia

En cada país o región, las poblaciones tienen sus creencias y sus costumbres muy particulares de comportamiento en sociedad, hábitos que conocemos como cultura. En cada país o región, las poblaciones tienen sus creencias y sus costumbres muy particulares de comportamiento en sociedad, hábitos que conocemos como cultura. Muchas de ellas han germinado, cultivado y desaparecido con el paso de los años, mientras que otras han permanecido o evolucionado. Estas culturas han determinado las maneras de pensar y de actuar de las personas que las han conformado. Las culturas en las que se han sembrado las semillas del desarrollo de oriente a occidente, de norte a sur, en todas las etapas de la raza humana, han tenido manifestaciones, tanto positivas como negativas, y las cuales han dejado importantes legados para cada nueva generación que los heredan. Precisamente, es necesario destacar a culturas como la egipcia con sus construcciones milenarias; la griega con su pensamiento y su saber; la romana con su militarismo; y a las animistas. forjadoras de potentes dioses que todavía son mencionados. Así, por ejemplo, la historia da cuenta de que los griegos fueron los primeros que utilizaron la razón, abriendo a paso a diversos saberes teóricos y aplicados, tales como la arquitectura, la literatura, el teatro, la ingeniería y la medicina; la técnica y la tecnología, y a la concepción del Estado como hoy lo conocemos. De hecho, Sócrates, Platón y Aristóteles son nombres que todavía están vigentes por sus doctrinas e ideologías. En definitiva, la civilización griega del comienzo aportó elementos fundamentales que hoy nos permiten concebir y asumir el mundo moderno. Por otra parte, la Roma de hace siglos, también dejó un valioso legado cultural, el cual se extendió por vastos territorios sobre los que marcó profundas huellas. Entre sus más destacados aportes están el derecho romano, importantes elementos para la religión cristiana, el arte de la oratoria, el latín –idioma base de la mayoría de las lenguas romances–. Es válido anotar que entre los precursores de la cultura occidental, plasmados en textos literarios, históricos y de investigación, todavía figuran escritores, filósofos, historiadores y médicos de origen romano y de alto reconocimiento. De sus inventos más relevantes pueden mencionarse: los acueductos, el cemento y las técnicas quirúrgicas en la medicina. En cuanto a los egipcios, los historiadores hablan de sus grandes aportes a la humanidad, que han sido esenciales para el desarrollo de la sociedad. A ellos se les atribuye el incentivar los movimientos populares, la creación de técnicas para el planteamiento y solución de problemas, el método algebraico, el sistema decimal y las fórmulas matemáticas complejas, así como los jeroglíficos, estos últimos considerados la escritura más antigua del mundo. En breve, los orígenes del método científico, de la fabricación del vidrio y de la navegación a vela, así como el descubrimiento del calendario de 365 días, también tienen sus inicios en la civilización egipcia. El lado oscuro de las culturas De la misma manera como estas culturas, en términos generales, fueron artífices de obras constructivas para que el ser humano ampliara su conocimiento y su conciencia, también protagonizaron manifestaciones negativas para los seres humanos de su época (esta información puede ampliarse en libros históricos y en el espacio cibernético). Ahora bien, sin desconocer los grandes logros como los ya mencionados, hay que reconocer que, a lo largo de la historia, diferentes civilizaciones se centraron en diversas formas de agradar a sus dioses para obtener beneficios y para lo cual entregaban algo a cambio, siendo el sacrificio humano una práctica común en muchas de esas culturas en diferentes rincones del mundo. Los estudiosos de la materia han publicado cientos de estudios que hablan sobre los sacrificios en las diferentes culturas. Solo por hacer un breve recuento, en el antiguo Egipto, algunas personas decidían morir voluntariamente para hacer honor a sus dioses o a su rey; por su parte, la cultura china ancestral estuvo marcada por la dinastía Shang, en la cual, hombres jóvenes eran sacrificados y enterrados sin ninguna de sus pertenencias, también se sacrificaban niños y bebés de manera violenta. Igualmente, el pueblo Celta también fue conocido por sus rituales de sacrificios: enterraban una espada en la espalda del hombre y luego observaban sus movimientos hasta que moría; y todo ello en nombre de su religión Sin embargo, los rituales cruentos más conocidos fueron los llevados a cabo en la América precolombina, por parte de las culturas de los Aztecas, los Incas y los Mayas, tribus indígenas que realizaron grandes y devastadores sacrificios humanos, tanto de voluntarios como de aquellos que denominaban como enemigos o prisioneros, tanto niños y adultos. Sus prácticas son reseñadas por antropólogos e historiadores como desgarradoras y violentas. En síntesis, hay que aceptar esas grandes obras constructivas de esos diferentes grupos humanos milenarios. Cultura y conciencia: no importa la cultura a la que se pertenezca porque ningún ser humano decide dónde nacer, pero el ser humano sí es responsable de asumir sus actos, más allá del ambiente en el cual ha sido preparado para la vida y debe tomar conciencia de las implicaciones de su manera de obrar. Cada quien debe hacer su propio juicio del medio en el que vive y actuar para fortalecer lo que sea pertinente, retomando lo que es positivo de otras culturas y desechando lo que implica sacrificios. Lo cierto es que la cultura no tiene la culpa. ¿Cuánto daño se ha forjado a partir de las creencias y las ideologías? Es tiempo de liberarnos de todas estas ideas que pueden hacer daño a la integridad del ser humano. Imágenes copipegadas de: http://bit.ly/2uJLf90,  http://bit.ly/2ube8hA  y http://bit.ly/2u6izte  (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los URL tienen técnica de acortamiento aplicado) Por: Adriana Patricia Cano Mesa Comunicadora – Uniremington acano@uniremington.edu.co

La tecnología para el lenguaje español: ¿un mal necesario?
La tecnología y el lenguaje español

Con el título de este artículo puedo parecer extremadamente ortodoxo; una persona aficionada a las murallas, incluso, adepto a Donald Trump con su proyecto de que los mexicanos construyan un muro que los “aísle” del territorio incólume de los Estados Unidos. Con el título de este artículo puedo parecer extremadamente ortodoxo; una persona aficionada a las murallas, incluso, adepto a Donald Trump con su proyecto de que los mexicanos construyan un muro que los “aísle” del territorio incólume de los Estados Unidos. Ahora sí, desarrollo un poco más la cuestión (“- ?”: ver tabla final: Diccionario SMS) para lo que hago un bosquejo básico de la tecnología en general. Es innegable que la tecnología, y desde luego, las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), se convierte en un delta mundial, de cuatro puntos cardinales, cuyo riego lleva insumos determinantes para el desarrollo y progresos de millones de poblaciones, aunque también muchas quedan rezagadas en este aspecto. En este contexto, remarco, entre muchos aspectos, el impacto de la tecnología basada en la mensajería instantánea, la que está enmarcada en herramientas conocidas como: SMS (mensajes de texto), el chat, el wasap, Microsoft Messenger, BlackBerry BBM, Skype, Google Talk, entre otras. Precisamente, a partir de lo anterior, me centro en las abreviaturas que se han impuesto en las redes sociales y en todos los idiomas, lo cual no puede convertirse en aquel coloquio de nuestra cultura que reza: “Mal de muchos, consuelo de tontos”. Y es que indudablemente, esas abreviaturas que hacen parte del lenguaje “tecnológico”, se han convertido en un deformador de nuestro idioma español, lo que en definitiva ya se establece como un mal necesario, dizque en beneficio de una comunicación más ágil y fluida. Algunos defienden esas abreviaturas… Retomo un aparte del artículo: “El impacto de la tecnología en el lenguaje”, publicado en Espectador.Com , periódico digital uruguayo, el cual también cita a Carlos Jones, profesor de idioma español y miembro de la Academia Nacional de Letras y de la Real Academia Española. “Esta tendencia a abreviar palabras, cuyo principal grupo lo constituyen los jóvenes del siglo XXI a través de los mensajes de texto, no nace de la explosión de la telefonía celular ni del chat. Anteriormente hubo otros grandes inventos de la humanidad que ya utilizaban palabras abreviadas para la comunicación. Por lo menos así es como lo ve Jones: ‘El telégrafo fue un gran invento. Pero yo me acuerdo que a mí, en la escuela, me enseñaban a escribir telegráficamente. ¿Y cómo se escribía un telegrama?, se suprimían artículos, preposiciones, se colocaban las partes de una oración de determinada manera para poder abreviar palabras. No es algo que se ha inventado ahora... Todos nosotros cuando tomábamos apuntes en clases, entre los cuales me incluyo, no escribíamos `que´, escribíamos una `q´, con una tilde si se trataba de un `qué´ enfático. No escribíamos `para´, escribíamos una `pa´ o no escribíamos `por´ sino que hacíamos el símbolo de multiplicar. Según sea la tecnología el invento de la nueva escritura será uno u otro’, enfatizó La mayor cantidad de letras en los mensajes de texto se vuelve más caro debido a que los celulares tienen un límite establecido de 160 caracteres, por lo que las personas tratan de no superar ese espacio para ahorrar un mensaje. Todo esto lleva a abreviar palabras, sumado al poco conocimiento del idioma español que tienen los jóvenes. Este es un tema que preocupa mucho a los docentes”. (el resaltado es mío). Otros no están de acuerdo… Copipego del mismo texto de Espectador.Com, otra opinión al respecto de esas abreviaturas nacidas de la tecnología misma: “En tanto, los profesores de secundaria coinciden en que la tendencia de los alumnos es escribir cada vez menos y utilizar palabras raras o fuera de lenguaje académico mínimo exigido por los docentes. Es por eso que en muchos de los casos los alumnos trasladan su forma de expresión virtual a una hoja de escrito. Ana María La Luz es profesora de Sociología y Derecho […], la consultamos sobre este tema: ‘Eliminan las vocales. Si van a poner `que´ ponen simplemente `q´. Pero el tema puntual es que hasta la propia palabra mensaje en un escrito de sociología sobre el tema de la cultura, hablando sobre mensajes culturales, un alumno me escribió algo así como `SMS cultural´. A la hora de corregir me costó identificar qué es lo que me quería decir, pero ya directamente ni la palabra mensaje escriben y ese tipo de lenguaje no sólo lo utilizan en el celular, lo utilizan en todo […] En este ejemplo que les mencionaba anteriormente, me pasó que en la corrección el alumno me pregunta que era lo que yo le había subrayado, hasta que se dio cuenta y me dijo: `que horrible profesora, disculpe´. Es algo que ya lo tienen como un comportamiento automatizado. Para que un escrito esté bien desde el punto de vista académico, no sólo tiene que tener un buen contenido, sino además la forma en que se expresan, la redacción, etcétera’. (El subrayado es mío). Para finalizar entonces –por ahora– esta temática de las abreviaturas que deforman el español y para mí, un mal necesario propiciado por la tecnología y las TIC en el lenguaje español, cortapego una parte del listado que publicó Espectador.Com. Ustedes deciden si lo asumen para descifrar códigos “tecnológicos” o los aplican para una comunicación “fluida” en las redes sociales: Diccionario SMS cuestión - ?     Abecedario - abc calcetines - klztnes demasiado - d+iao Aburrido - abrrdo calimocho - klimoxo deprimido - dwn además - ad+ cállate - kyat desde - dsd adiós - a2/bye cama - kma diapositiva - diapo al menos - al - demasiado - d+iao día - da amarillo - amryo deprimido - dwn días - dd año - ñ desde - dsd dinero - $ años - aa diapositiva - diapo dirección - dir aunque - a1q día - da cabeza - kbza ayuda - sos días - dd café - kf cabello - kbyo baja - bj dinero - $ cine - fx bastante - bstant/b stnt dirección - dir colchón - c8n beber - bbr cabeza - kbza colegio - clgio belleza - byeza café - kf compañerp - cmpa besitos - besit2 calcetines - klztnes contesta - cntsta beso - b calimocho - klimoxo cansado - knso butaca - butak cállate - kyat bueno - weno de - d decir - dcir dedos - d2 cama - kma camiseta - kmiz   cumpleaños - qmple/qmplaños   Imágenes copipegadas de:  http://bit.ly/2tjExcz; http://bit.ly/2th120I y http://bit.ly/2tgZXpH (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los URL tienen técnica de acortamiento aplicado). Por: César Augusto Muñoz Restrepo Corrector de estilo institucional de Uniremington cmunoz@uniremington.edu.co

De múltiples culturas milenarias a una sola cultura orbital
Cultura orbital

Desde las culturas milenarias, entre las que se destaca la egipcia y que se extendió durante tres mil años, la especie humana tiende a convertirse en una sola cultura en su pensamiento, en su saber y su forma de ser. Desde las culturas milenarias, entre las que se destaca la egipcia y que se extendió durante tres mil años, la especie humana tiende a convertirse en una sola cultura en su pensamiento, en su saber y su forma de ser. Vale anotar que el acorazamiento de la cultura egipcia le permitió permanecer sin mayores cambios durante toda su vigencia, exceptuando fenómenos de mayor envergadura como el tránsito del politeismo al monoteismo. De la misma manera, las más reconocidas culturas de la antigüedad, tales como: la fenicia, la hebrea, la china, la persa y la romana tuvieron una apreciable duración en el tiempo -aspectos que les dieron este carácter- durante el cual forjaron sus diversas manifestaciones, realizaciones y conquistas. Los historiadores dan cuenta de que estas culturas nacieron hace miles de años generando un conjunto de conocimientos, saberes y costumbres que han constituido la base fundamental para el avance social al que hemos llegado en la actualidad, el cual consideramos acelerado en comparación con otras épocas. Las lenguas, las religiones, el vestuario, las prácticas rituales, la alimentación, la constitución de las familias y los grupos humanos les dieron a cada una su particularidad. En diversos portales web en los que narran los hallazgos antropológicos sobre ciertos rasgos que distinguen a las culturas milenarias, se puede encontrar, por ejemplo, que la escritura cuneiforme de los sumerios en nada se asemeja a los quipus incas, mientras que los dioses y prácticas religiosas de los chinos pocas similitudes tienen con el contexto de las comunidades africanas. Ahondando en este recorrido histórico, los sumerios comenzaron a plasmar su idioma mediante pictogramas que representaban palabras y objetos; investigadores de la materia han revelado que la escritura cuneiforme es una de las formas más antiguas de expresión escrita, de acuerdo con los registros arqueológicos y la cual se usó por primera vez 3400 a.C.. Por su parte, los incas utilizaron nudos en ramales de cuerdas de varios colores, hechas de lana o algodón, en las cuales, expertos en la materia han podido descifrar palabras o mitos de esta cultura; de hecho, esta técnica llamada quipus, es comparada hoy con un sistema binario similar al que utilizan los computadores. Religiones, rasgos determinantes de las culturas En cuanto al aspecto de las religiones en estas culturas, los expertos en la materia aseguran que existen grandes diferencias, en algunas de ellas son bastante notorias. Para la muestra, la religión china es politeísta y con ciertos elementos del chamanismo; además, influenciada por el budismo, el confucianismo y el taoísmo, en la que se incluye la veneración de los ancestros y el culto a dioses naturales o astros como la Luna y el Sol. Lo contrario ocurre en África; allí sobresalen las religiones del cristianismo y el islamismo, aunque también existen pequeñas comunidades judías y otras que practican cultos hindúes, budistas y taoístas. En el fondo, lo anterior referencia una idea de lo diferente que puede llegar a ser el concepto de lo ultraterreno, pero que al final de cuentas nos une como comunidad, sin importar el lugar del mundo en el que nos hallemos. Ahora bien, las diversas civilizaciones también se han distinguido por sus formas de vestir, lo cual, desde la antigüedad ha demarcado una sectorización, un estatus o ciertas castas. Actualmente, es muy útil remitirnos a portales web en distintos idiomas para indagar sobre este aspecto. Incluso, se encuentran fotografías que nos ilustran sobre las grandes diferencias entre las prendas de vestir que utilizaban los chinos antiguos y los indígenas mayas, por citar un ejemplo; y cómo cada cultura demarcaba el estatus de las personas mediante sus ropajes. En suma, es de reconocer que fueron culturas asentadas de manera sólida en estas expresiones, a partir de las cuales hubiese sido posible que se perpetuaran en la historia, salvo los hechos que generaron su mutación. Por lo mismo, estas fueron desapareciendo sin hacer contraposiciones de peso a las fuerzas que se les oponían y a otras, que con mayor poder, continuaron marcando caminos, formando imperios y entregando a la posteridad un rico legado en diferentes campos. Es válido resaltar que entre varios legados, hay uno en especial que influyó en centenares de generaciones: el Derecho Romano, plataforma esencial de la normatividad en el mundo occidental. En efecto, varios de los direccionamientos de esa época hoy se aplican con gran similitud. Así pues, existen muchas transferencias de rasgos culturales que han transcendido y se han modificado para adaptarse al mundo moderno y acordes con las necesidades emergentes. Un mundo hiperconectado  Lejos de los pequeños o grandes adelantos experimentados por las culturas, el impacto crucial frente al modo de comunicarnos en el siglo XXI nos proyecta hacia una nueva y única cultura mundial, uniforme en todas sus manifestaciones. El muy acelerado avance en el mundo de las comunicaciones y la tecnología, hoy nos posibilita el conocimiento simultáneo de los sucesos de cualquier rincón del mundo, de las maneras como actúan las personas que allí viven, sus formas de pensar, de actuar o de vivir. En este contexto, la internet ha marcado una gran revolución en este aspecto. Por su parte, las redes sociales son otros canales que han contribuido a la globalización del mundo moderno. A través de ellas, más allá de conocer virtualmente muchos ambientes, costumbres y demás aspectos de un lugar, también podemos entablar relaciones con personas que, en apariencia, podrían ser muy diferentes a nosotros dadas sus culturas, pero que en realidad comparten muchas similitudes. Así, por ejemplo, en este instante, una joven de 16 años en una población de la China, puede consultar en su teléfono móvil los estilos de corte y color de cabello que están de moda en la Ciudad Luz, así como descubrir que es el mismo que hace pocos días le hicieron en un lujoso establecimiento del más cercano centro comercial de su residencia. Hay que reconocer que hace algunos años, el desconocimiento o poco manejo de un determinado idioma era un limitante para viajar a otros países. Sin embargo, hoy existen múltiples tecnologías que facilitan  comunicarnos con otros interlocutores sin importar qué lengua hablen. Precisamente, uno de los inventos más revolucionarios, desarrollado por un grupo de ingenieros radicados en Nueva York, es el audífono que traduce conversaciones en tiempo real, al igual que se puede procesar información de forma simultánea con la comunicación establecida. En breve, con los acelerados avances tecnológicos y comunicacionales, no serán necesarios, en pocos años, idiomas diferentes y estilos de vida que separen esta masa planetaria. Imágenes copipegadas de: https://shutr.bz/2rvJJVf  y http://bit.ly/2rhoaZe  (Pixabay: banco de imágenes gratuito / Los URL tienen técnica de acortamiento aplicado). Por: Adriana Patricia Cano Mesa Comunicadora – Uniremington acano@uniremington.edu.co